
Aunque no lo parezca, una plastificadora puede ser un elemento muy útil en nuestro día a día. Y es que, cuando hablamos de plastificar, las posibilidades que se nos presentan son infinitas. Ya sea para el hogar, la oficina o el colegio, las plastificadoras y fundas de plastificar nos ofrecen infinidad de opciones.
Plastificar es algo muy sencillo y simple, con el que podemos conseguir unos resultados increíbles. De esta forma, podremos plastificar desde carteles hasta fichas de aprendizaje para los más pequeños de la casa, o figuras para que se diviertan jugando, asegurándote de que cada una de las figuras resistirá a sus juegos.
Sin embargo, no siempre se trata de plastificar folios enteros. En muchas ocasiones necesitamos plastificar otros elementos de menor tamaño como las fichas o figuras mencionadas.
Si lo que quieres es plastificar elementos pequeños, como fichas o formas diversas, lo ideal es colocar los diferentes recortes dentro de la funda, dejando espacio suficiente entre ellos para poder recortar cada uno una vez tengamos el conjunto entero plastificado. Una vez colocados cerramos la funda para plastificar y revisamos bien que todos los elementos sigan bien colocados y no se haya movido ninguno.
Un truco para poder manipular la funda con todos estos pequeños elementos en el interior es ayudarse de un cartón o cartulina con un grosor considerable, que nos sirva de bandeja. De esta forma, colocaremos con cuidado la funda encima y podremos transportarla hasta la plastificadora sin que se nos descoloque nada.
Igualmente, para introducir la funda en la plastificadora, teniendo en cuenta que la entrada suele estar a cierta altura, nos podemos ayudar de algún libro, bandeja o cualquier otro objeto que nos permita apoyar la funda con los recortes para poder introducirla en la plastificadora sin que se nos muevan los elementos del interior.
Como se trata de un conjunto de elementos que vamos a recortar, es imprescindible que se haya quedado perfectamente pegado en todas partes. Por ello, si vemos que han quedado zonas sin pegar o con burbujas, volveremos a pasar la funda por la plastificadora todas las veces que sean necesarias para conseguir un resultado optimo. ¡Listo! Ahora lo único que tendremos que hacer es recortar con cuidado las diferentes formas, procurando dejar un poco de espacio a los lados de la figura para que no se despegue.
¿Habías plastificado alguna vez elementos pequeños? Comparte con nosotros como lo hiciste.