
La creatividad, la imaginación y la expresión artística son algunos de los aspectos que más hay que fomentar en edades tempranas. Esta actividad tiene grandes beneficios y una de las formas más idóneas de estimular a los más pequeños es a través de los museos y las actividades que ofrecen.
Algunos de los beneficios de la pintura son:
- Se estimula su motricidad fina, es decir, la facultad de movimientos que requieren de precisión.
- Fomenta su imaginación, creatividad, sensibilidad, concentración y expresión. Por ello, es una manera perfecta para desahogarse, una actividad muy terapéutica.
- Ayuda a desarrollarse individualmente, su autoestima y a comunicarse.
- Estimula su intelecto, ayudándole a organizar sus ideas y resolver problemas.
Los museos son un lugar perfecto para impulsar esta práctica en los niños. Aprender de los maestros de la pintura, admirar sus creaciones y conocer la historia del arte son esenciales para apreciar esta actividad y crecer pintando. Estos son algunos de los talleres más divertidos que ofrecen los museos:
- “El Árbol de tu vida”. El Museo del Prado organiza diferentes actividades en su programa para familias. Este taller está dirigido a familias con niños entre 4 y 12 años. A través de esta actividad podrán conocer algunas de las historias que esconden algunas obras y podrán crear una obra propia.
- Family Thyssen. El Museo Thyssen organiza cada fin de semana este taller cuyo objetivo es acercar el arte a niños entre 6 y 12 años. Se realiza en inglés y se hace un recorrido a través de las pinturas que recrean ciudades, un paseo por el mundo a través del arte.
- Museo Reina Sofía. A través del juego, los niños aprenderán a avalorar el arte contemporáneo en el Museo Reina Sofía. Una de las propuestas es “De la mano” en la cual se invita a los niños a “vivir y modificar a través del juego libre” una instalación de un artista. La otra propuesta es “Cuando el cuerpo habla” que a través del gesto, la acción, el teatro, se descubrirán como las obras “contienen historias que traspasan las fronteras”
Además, para que se sientan se sientan aún más profesionales y artísticos es una buena idea comprarle material artístico como un caballete de pintor, junto a una paleta de colores e incluso una bata. El look perfecto para el pequeño pintor.